miércoles, 23 de abril de 2008

ARTE Y POLITICA EN ARGENTINA


¿LA FUSIÓN DEL ARTE Y LA POLÍTICA O SU RUPTURA?
El caso de Tucumán Arde: Argentina 1968


Por Beba Balvè

Introducción

El trabajo que presentamos a continuación, desarrolla un aspecto de una investigación en curso que se encuentra en el marco del Programa General de investigaciones del Centro de Investigaciones en Ciencias Sociales —CICSO—.

Han pasado más de treinta años del hecho conocido bajo el nombre Tucumán Arde, y a pesar del tiempo transcurrido, continúa siendo el referente obligado para quienes se ocupan del tema de las Vanguardias del Arte de los ‘60, a nivel nacional e internacional.

Algunos de sus protagonistas, artistas e intelectuales del campo de las ciencias sociales, y de la literatura, han aportado su interpretación, la que ha tomado estado público por medio de testimonios y reportajes en medios periodísticos y revistas especializadas.

Las opiniones vertidas, muestran una serie de matices y donde algunos de los aspectos son enfatizados más que otros.

Esta suerte de valoración de los datos tiene su lógica, habida cuenta que el colectivo Tucumán Arde se constituyó con personas cuyas motivaciones eran diferentes entre sí, como también su cosmovisión ideológica de la realidad. A esto se suma, en los últimos tiempos, el aporte, realizado por parte de investigadores en Ciencias Sociales con inserción en la UBA, que constituyeron a este hecho en un objeto de investigación, desde un marco analítico, interpretativo y conceptual, que se corresponde con las teorizaciones dominantes desde la década del ‘80, en Argentina y el mundo.

Si bien formé parte de la producción de Tucumán Arde, en este trabajo me propongo establecer la distancia entre mi participación y el hecho a dilucidar, que en este caso constituye el objeto de investigación y análisis. En definitiva, de lo que se trata es de poder conceptualizar a Tucumán Arde, desde la distancia del tiempo transcurrido, y además establecer la distancia subjetiva entre mi persona y el objeto de investigación, siendo el propósito contribuir a la construcción de conocimiento.

CONSTRUCCIÓN DEL SISTEMA PROBLEMÁTICO

En el marco de nuestras investigaciones referidas a las luchas políticas y sociales de la doble década 60-70 (1), abordamos el estudio de un hecho de naturaleza artístico cultural, conocido bajo el nombre Tucumán Arde, único en su género en Argentina, y creemos que en el resto del mundo.

Su protagonista fue un colectivo formado por artistas provenientes en su mayoría de las artes visuales e intelectuales, todos de las ciudades de Buenos Aires y de Rosario (2), y donde el propósito que los unifica es la construcción de una nueva estética identificada con los fines de la Revolución Social.

En 1968, este grupo de artistas consustanciados con el Programa del 1º de mayo de la CGT de los Argentinos que liderara Raimundo Ongaro, deciden sumarse al proyecto político cultural de esta central obrera y constituyen una comisión, bajo el nombre Comisión de Agitación y Propaganda. En el Programa, los obreros enuncian un plan de lucha contra la política económica del gobierno, por el agravamiento de las condiciones de vida de la masa trabajadora (rebajas salariales, desocupación, explotación), en particular la de las provincias más empobrecidas del país.

Los artistas deciden crear un hecho que denuncie lo que sucede en Tucumán con el cierre de los ingenios, impuesto por el gobierno central, y la represión a las movilizaciones. El hecho toma la forma de una muestra, siendo su sentido congruente con el nombre de la comisión, habida cuenta que combina dos tareas sociales, la agitación y la propaganda; por un lado se denuncia lo que sucede en Tucumán y por otro se busca explicar y difundir sus causas.

Los locales de la CGTA de Buenos Aires y Rosario, donde se exhibe la muestra, guardan relación con este propósito. Para sus protagonistas, la central obrera no es concebida como un lugar posible entre otros, sino que se lo asume como un espacio en su relación con la clase obrera.

En apretada síntesis, Tucumán Arde es una puesta en escena de las luchas obreras y populares en Tucumán en contra de la aplicación del llamado Operativo Tucumán, que impulsa el gobierno nacional, dentro de la política de reconversión industrial de la provincia, que implica el cierre de más de una decena de ingenios azucareros y la pérdida de fuentes de trabajo. En la muestra se utiliza una amplia variedad de soportes visuales y audiovisuales: fotos, afiches, carteles, posters, testimonios grabados, gráficos murales, etcétera, donde se denuncia la vinculación de los dueños de los ingenios con el capital financiero internacional.

El manifiesto Tucumán Arde (3), dado a conocer el día de la inauguración en Rosario, enuncia una nueva concepción del arte y del artista frente a la realidad.

El arte revolucionario nace de una toma de conciencia de la realidad actual del artista como individuo dentro del contexto político y social que lo abarca.

El arte revolucionario propone el hecho estético como núcleo donde se integran y unifican todos los elementos que conforman la realidad humana: económicos, políticos, sociales, como una integración de los aportes de las distintas disciplinas, eliminando la separación entre artistas, intelectuales y técnicos, como una acción unitaria de todos ellos dirigida a modificar la totalidad de la estructura social, es decir, un arte total.

El arte revolucionario acciona sobre la realidad mediante un proceso de captación de los elementos que la componen, a partir de una lúcida concepción ideológica, basada en los principios de la racionalidad materialista.

El arte revolucionario, de esta manera, se presenta como una forma parcial de la realidad que se integra dentro de la realidad total, destruyendo la separación idealista entre la obra y el mundo, en la medida en que cumplen una verdadera acción transformadora de las estructuras sociales, es decir, un arte transformador.

El arte revolucionario es la manifestación de aquellos contenidos políticos que luchan por destruir los caducos esquemas culturales y estéticos de la sociedad burguesa, integrándose con las fuerzas revolucionarias que combaten la forma de la dependencia económica y la opresión clasista, es decir, un arte social.”

En función de hacer inteligible tanto el hecho como el manifiesto, intentaremos localizarnos en el período 1955-1969. En cada uno de estos extremos suceden en el país grandes batallas libradas por la clase obrera y los sectores populares. En primer lugar estamos haciendo referencia a la insurrección proletaria de septiembre de 1955 en Rosario, como consecuencia del desalojo del gobierno de Perón por parte del golpe de estado de la Revolución Libertadora. También en Rosario, en septiembre de 1969, se da otra insurrección obrera, dentro del proceso de los hechos de masas de ese año, conocido bajo el nombre del Rosariazo.

Con el golpe de estado de 1955, se inicia el período de la proscripción de la fuerza electoral mayoritaria, el peronismo, y a la vez, la proscripción política y social del movimiento obrero en su totalidad, ya que la política económica que aplica el gobierno contra los trabajadores, afecta a todos sin distinguir signo ideológico o político. En medio del quiebre de la legalidad burguesa, toma forma la crisis parlamentaria, en tanto producto de la crisis de la dominación política de la burguesía argentina, crisis que envuelve al conjunto del sistema político, los partidos y cuadros políticos, habida cuenta que éstos legitiman la proscripción de las mayorías por parte de los gobiernos. Finalmente, lo que nos aparece como una crisis de dominación política de la burguesía no es más que la expresión de la alteración de las relaciones de poder entre las clases, situación que a partir de ese momento crea un estado de crisis revolucionaria de todas las clases y fracciones de clases.

Bajo estas condiciones se llega a 1969, donde los tres combates de masas, Rosariazo y Cordobazo de mayo y Rosariazo de septiembre, logran constituir las condiciones de una situación de masas, una política de masas y una fuerza de masas. Se trata de un proceso de ascenso de masas que logra convocar a fracciones sociales de burguesía y de pequeña burguesía (estudiantes, profesionales, etc.), las que a partir de ahí, y bajo la iniciativa del movimiento obrero y su programa, van constituyendo los diferentes frentes de lucha.

En este medio, y en relación a Tucumán Arde, distinguimos dos procesos: por un lado el proceso que constituye al colectivo Tucumán Arde, y por otro, el proceso de desarrollo y realización de la estrategia proletaria del movimiento obrero. La hipótesis sería que en Tucumán Arde se sintetiza y condensan ambos procesos, siendo el Programa de la CGT, el que los articula. La adscripción al mismo, por parte del colectivo Tucumán Arde, es el indicador del inicio de las condiciones de la conjugación de la disposición subjetiva del arte y la ciencia en el propósito de la transformación social, todo dentro de las condiciones objetivas de una situación revolucionaria. Puesto en este contexto Tucumán Arde sería una forma de lucha entre otras que asume una embrionaria alianza de clases entre artistas, intelectuales y movimiento obrero, bajo la iniciativa y conducción de la CGT, de lo que se desprende el carácter estratégico del Programa, habida cuenta que plantea además, la construcción de una política para el frente político cultural de masas.

En síntesis, Tucumán Arde nos permite hacer observable la reformulación que hacen los artistas de su acción, reflexión, conceptos, tácticas y estrategias que acompaña un proceso social en el que se conjugan los paradigmas de un arte revolucionario y la revolución social, cada uno con sus leyes de construcción y diferentes actores y tareas sociales.

Dentro de un marco teórico conceptual que haga inteligible este proceso, introducimos la noción de crisis ideológica y ruptura de relaciones sociales donde en principio la hipótesis de la que partimos sería que, dentro del movimiento social general, hay que distinguir las capas y fracciones sociales que hacen crisis ideológica frente al estado de cosas que sucede, de aquellos otros que inician un proceso crítico en el plano del conocimiento que los conduce a establecer una relación de lucha con la clase obrera (los que asumen el programa de lucha de la CGT) (4), lo que lleva a que, las nuevas relaciones que tejen, produzcan una ruptura de sus relaciones preexistentes con la cultura oficial, que incluye museos, premios, instituciones y el stablishment modernizante del Instituto Di Tella. En síntesis, el problema de la crisis ideológica y las crisis y rupturas de relaciones sociales guarda relación con los grados de conciencia adquirida del conflicto social y la disposición a la lucha, de donde la escala que permite medir va de crisis ideológica a crisis de conciencia, siendo el punto de torsión una posición crítica frente a la realidad.

En síntesis. El basamento material y concreto, que hace posible las crisis ideológicas, la ruptura de relaciones sociales y su pasaje a crisis de conciencia, se asienta en una doble crisis de carácter orgánica: la agudización de la crisis económica y la profundización de la crisis parlamentaria y de partidos.

Finalmente. Relaciones sociales, alianza de clases, fuerza social, procesos sociales, lucha, grados de conciencia adquirida del conflicto social, son los indicadores que nos permiten conceptualizar a Tucumán Arde como un hecho social; y es social porque forma parte de un programa que le otorga sentido y proyección estratégica a las luchas políticas y sociales del período.

Ahora bien. Desde nuestra perspectiva, el criterio para investigar un hecho social consiste en plantearse un problema de la realidad actual, de ahí que a modo de introducción vamos a partir de una de las interpretaciones dominantes en el campo de las Ciencias Sociales hoy día, que conceptualiza a Tucumán Arde como una experiencia de fusión o confluencia del arte y la política.

Dilucidemos inicialmente el concepto mismo de política, remitiéndonos a Antonio Gramsci (5), que es uno de los estudiosos que más aportó sobre este tema. Gramsci, que basa sus teorizaciones acerca de la política partiendo de las formaciones sociales capitalistas, sugiere que la política es una relación de fuerzas que en la estructura económica social parte de los grupos sociales, quienes por medio de la negociación intentan que sus intereses sean legalizados y legitimados por el estado. Los grupos de la estructura tienden a organizar sus intereses económicos en diferentes grados que se corresponden con los diferentes momentos de la relación medidos por una valoración de los grados de homogeneidad, autoconciencia y organización de los intereses dentro de una escala de autoconciencia a conciencia política colectiva.

La ideología brota del mismo grupo social y su consistencia la otorga la relación que establece con los otros grupos sociales en los siguientes grados: a) el económico corporativo; b) el político corporativo, y c) el de la hegemonía de un grupo social. Esta es la fase en que las ideologías se transforman en partidos y una sola o una combinación de las mismas establece el momento de la hegemonía sobre una serie de grupos subordinados.

En una estructura económico-social, economía y política no son escindibles. En países capitalistas la existencia del Estado-Nación contiene el edificio jurídico de la soberanía, el sistema institucional político y social, los aparatos del estado y la ideología que conllevan. El grupo social de la estructura, que logra la hegemonía, se apropia del aparato del estado, y desde ahí orienta sus políticas económicas al conjunto de la estructura económica social definida ésta como el espacio económico social de la nación que se identifica en sus cuatro dimensiones (6): la moneda, el mercado, las barreras a la movilidad de factores de producción y a un conjunto de normas institucionales y compromisos sociales.

Volviendo. La sociedad —mercado— es el ámbito de la relación entre iguales, todos propietarios, por lo tanto la ley que rige es la de la competencia, con lo cual el ámbito de la política refiere a la competencia entre iguales y esto es lo que, en términos políticos institucionales, se denomina el consenso.

Si introducimos la noción lucha, nos encontramos en otro ámbito. ¿Cuándo comienza la lucha? Cuando se discute la proporción en que se distribuye la riqueza socialmente producida. Aquí la lucha se establece entre propietarios y no propietarios de sus condiciones materiales de vida. En este ámbito rige la ley de la coacción extraeconómica de los gobiernos y sus aparatos, que se expresa en las políticas del ingreso o las políticas distributivas, más la legislación, que es la que crea las condiciones objetivas en que se desenvolverán las luchas políticas y sociales de la sociedad y del período.

Ahora bien. La particularidad que diferencia al régimen capitalista de los que le precedieron es que enlaza distintos modos productivos y a su vez distintas combinaciones de ese enlace conforman estructuras económico-sociales en acción (7).

De ahí el movimiento incesante de esas estructuras —crisis— que toman forma de movimientos sociales. Esas estructuras sociales en acción que devienen del desarrollo del capitalismo y que constituyen una combinación de relaciones sociales, conforman múltiples movimientos sociales, los que finalmente tienden a organizarse en un solo movimiento nacional y social de oposición política, centralizando la dirección de las luchas, penetrando el sistema político-institucional, alterando el orden en que se encuentran organizados los hombres, de donde lo que aparece como un desorden para unos (subversión), implica otro orden, un nuevo orden.

Desde esta perspectiva, ¿qué es lo que media entre la base material y la superestructura política, jurídica e ideológica? Los movimientos sociales. ¿Y qué es lo que los articula, cambiando el carácter? Los enfrentamientos sociales, siendo la lucha su mecanismo. ¿Y qué explica la existencia misma del enfrentamiento social? El pasaje de lucha interburguesa basada en la negociación al momento en que se produce una ruptura y emerge el antagonismo de clase. Allí es cuando se ha constituido una fuerza social, armada moral y materialmente, con iniciativa de la clase obrera y en donde a partir de ese momento, el enfrentamiento no es contra política de gobierno, sino entre estado y masas.

La temática referida al movimiento orgánico del desenvolvimiento del hombre en general (régimen de producción capitalista) del cual, los movimientos sociales son elementos de ese todo, nos introduce al terreno de las relaciones sociales. El conjunto de las relaciones sociales, sean éstas políticas, ideológicas, económicas, religiosas, artísticas o de clase, recorre los tres campos de la realidad que refieren a la lucha política (régimen-pueblo), lucha económica (burguesía-proletariado) y lucha teórica (reformismo-revolución). A su vez estos campos se encuentran cruzados por tres teorías, las que en conjunto refieren a la teoría general de la lucha de clases.

Las tres teorías con sus leyes y dimensiones que toman cuerpo de teoría científica refieren a:
1) la teoría del estado teórico, práctico;
2) la teoría de la organización social;
3) el análisis de situación. Para este caso situación revolucionaria.

Introduzcamos ahora la noción de hecho social.

Desde nuestra perspectiva, no todo lo que sucede en la realidad puede ser conceptualizado un hecho social. Definir a un hecho con el atributo de social implica una serie de operaciones, que toma en cuenta el problema, de las relaciones sociales, alianzas de clases y fuerzas sociales, y qué clase social tiene la iniciativa, de lo que se desprende el ser social que se realiza en cada enfrentamiento social. De ahí que frente a un hecho social, lo que se trataría de investigar sería cuáles son los campos de relaciones sociales involucrados: el económico, el político y el teórico, sabiendo a priori que si es un hecho social debe contener, en algún grado a precisar, todos estos campos y elementos.

Volvamos por un momento a la conceptualización de Tucumán Arde "fusión del arte y la política”. Si la política sin lucha es el ámbito de la negociación, la pregunta sería ¿La situación de crisis y ruptura en las relaciones de los artistas con las instituciones del arte se produjo al margen o dentro de las relaciones de lucha de la sociedad? De esto se desprende otra pregunta: ¿Se podría haber establecido una nueva relación entre artistas, intelectuales y movimiento obrero sin que previamente se hubiera iniciado el proceso de descomposición de las relaciones preexistentes de los artistas e intelectuales con el mundo de la cultura? ¿Qué valor le vamos a atribuir a los campos económicos, políticos, teóricos en la conceptualización del hecho?

Volviendo. Hacia 1968 en Argentina, la radicalidad de las luchas sociales altera las condiciones sociales generales en que se desenvolvía la lucha de clases y la relación existente entre las clases sociales. De la nueva relación de fuerzas que se crea, brota una situación de masas que se realiza y se hace efectiva en los tres combates de masas de 1969. La presencia de masas nos alerta que las luchas habían penetrado en el sistema institucional político y social, de ahí que la crisis ideológica que hacen los artistas e intelectuales, esté vinculada a la emergencia del movimiento de masas que tiñe todas las luchas del período, agudizándose la crisis de dominación política en donde, los de arriba no pueden seguir gobernando como entonces y los de abajo, no están aún en condiciones de gobernar.

El sistema institucional político y social, que incluye a las instituciones de la cultura, es un sistema de alianzas de clases largamente constituido, y que logra permanencia en el tiempo. Refiere a un conjunto de fracciones sociales y clases sociales cuyos intereses pasados, presentes y futuros se expresan bajo un programa político, económico y teórico que se impone al resto.

Entonces, el problema a dilucidar sería saber si la crisis ideológica y ruptura de las vanguardias del arte en relación con la cultura oficial es consecuencia de que estaba emergiendo un nuevo programa en la sociedad. Y además, si de ese programa brota el enunciado de una nueva estética basada en la teoría de la transformación social.


EL COLECTIVO TUCUMÁN ARDE

En el transcurso del año 1968, un significativo número de artistas plásticos de Buenos Aires y Rosario (Santa Fe), participan con sus obras en muestras organizadas por distintas instituciones del arte. En estos distintos escenarios a partir de sus declaraciones y del contenido de sus obras, manifiestan su posición política e ideológica en relación a los hechos políticos que suceden en el país y en el mundo; contra el gobierno de Onganía, en apoyo a las luchas estudiantiles en Francia, en contra de la guerra de Vietnam, el apoyo al Che Guevara, etcétera.

Este proceso que se profundiza en 1968, había comenzado mucho antes. Si bien este tema no será tratado en este trabajo, estamos en condiciones de afirmar que los hechos de 1968 señalan el momento de mayor envergadura en el conflicto entre los artistas y las instituciones del arte.

A partir de ese año comienzan a darse las condiciones de la emergencia de un pensamiento crítico respecto al papel de los artistas en relación con la sociedad y que incluye a las instituciones de la cultura oficial.

El tema problema de los artistas era cómo hacer para impedir que la producción artística, aun la más revulsiva y de ruptura, no fuera absorbida por el sistema, lo que llevaba a una revisión del sentido de su actividad y a quiénes va dirigida.

En este contexto toma forma una corriente que instala como línea de pensamiento el enunciado del concepto desmaterialización de la obra de arte, fundada en el principio de la relación arte y sociedad:

-Se acabó la contemplación estética porque se disuelve en la vida social. Se acabó también la obra de arte, porque la vida y el planeta mismo empiezan a serlo. (...) El futuro del arte se liga no a la creación de obras, sino a la definición de nuevos conceptos de vida; y el artista se convierte en el propagandista de esos conceptos. El ‘arte’ no tiene ninguna importancia: es la vida la que cuenta" (Roberto Jacoby).

Bajo estas proposiciones generales va tomando forma una tendencia, que configura en proceso la formalización de una nueva política cultural. El momento de máxima expansión de esta política es la realización de Tucumán Arde, hecho social producto de la relación establecida entre artistas, intelectuales y el movimiento obrero en el que confluyen arte y conocimiento mediado por el programa de lucha de la CGTA (Programa del 1º de mayo de 1968) (8).

Cabe recordar que la alternativa de un arte social en la Argentina no es un hecho novedoso, y su historia más próxima se remite a las primeras décadas del siglo XX y continúa hasta hoy día.

Sin pretender profundizar en el tema, porque no es materia de ese artículo, nuestra presunción es que en relación al arte social han existido y existen más de una alternativa, y entre ellas se encuentra Tucumán Arde. La diferencia radica en la programática que subyace en cada alternativa, en el sentido de que para algunos, lo social hace al contenido del arte, como aproximación ideológica hacia la clase obrera. Para otros, en cambio, lo social y político es uno y lo mismo, de ahí que se concibe al arte como un medio de lucha en el propósito de la transformación social, lo que implica un comportamiento teórico frente a la realidad.

Por otra parte, y en relación con las experiencias del pasado, el tema del arte social al estar planteado como un objetivo de educación de las masas en el camino de la revolución, sólo podía producir una conmoción ideológica en donde no se planteaba ninguna contradicción insalvable entre mantener un alineamiento favorable a las luchas políticas y sociales, nacionales e internacionales (guerra civil española, por ejemplo) y paralelamente continuar desarrollando la actividad artística bajo los mismos soportes.

Para el colectivo Tucumán Arde, arte y práctica revolucionaria no son escindibles, y no lo pueden ser porque desde su percepción se busca la asunción de la práctica artística como cumplimiento de una tarea social en el movimiento de masas; -aspira a transformar la sociedad de clases en una mejor.

En síntesis, dos concepciones del arte social en donde en unos cumple la función de educar y para otros es un medio en el proceso de transformación de la sociedad.

Volviendo. En 1968, la mayoría de los artistas, que tiempo después constituyen el colectivo Tucumán Arde, mantienen una presencia activa dentro de las instituciones del arte, fundamentalmente los de Buenos Aires, que están enrolados en el Instituto Di Tella.

Esto es así hasta que una serie de hechos convulsiona el mundo del arte, profundizando el conflicto en la relación artistas e instituciones. Estamos haciendo referencia a los hechos sucedidos en el Premio Ver y Estimar, Experiencias 68, Rosario 67, entre otros.

La entrega del Premio Braque (julio 1968) es un hito en el proceso de la crisis, donde el detonante es la denuncia de los artistas contra los jurados del premio frente a lo que consideran una acción de censura ideológica sobre sus obras. La magnitud del enfrentamiento, manifestada el día de la inauguración, se incrementó con la presencia de la policía, que detuvo por lo menos a diez artistas, a los que se trasladó a la cárcel de Caseros. Después, mediante gestiones realizadas por los abogados de la CGT, fueron puestos en libertad.

CONSTRUCCIÓN DEL HECHO TUCUMÁN ARDE

El colectivo Tucumán Arde toma forma en el momento en que maduran las condiciones para: formalizar un nuevo programa estético, que consiste en crear un hecho de carácter estético con fuerte impacto político, lo que lleva a establecer las bases para una organización de nuevo tipo. Bajo estas condiciones, se funda el Grupo de Artistas Argentinos de Vanguardia, que se propone como alternativa "una cultura que fuera de la mano de la clase obrera y el pueblo en el camino de la revolución" (9).

Paralelamente, el colectivo con asiento en Buenos Aires comienza a actuar en el seno de la CGTA, en la comisión de cultura, promoviendo la creación de una obra que denuncia los problemas que aquejan a la clase obrera en Tucumán. Desde la percepción de los artistas, Tucumán Arde es un hecho inédito "en que por primera vez en la historia de los movimientos plásticos argentinos, se da una verdadera y real unión de motivación e interés entre artistas e integrantes de la clase obrera" (10).



El Plan

La construcción del hecho Tucumán Arde se asienta en el diseño de un plan de acciones ordenadas en una sucesión tiempo-espacio que recorre distintos territorios sociales del perímetro nacional: Tucumán, Rosario, Buenos Aires.

Partiendo de un trabajo de campo, en la ciudad de Tucumán y sus alrededores, se recoge material para la muestra: fotos, testimonios de los trabajadores de ingenios azucareros y sus familias. A la vez se realizan entrevistas a dirigentes y activistas sindicales de la FOTIA, a pobladores desocupados, dueños de los ingenios, estudiantes, artistas, periodistas y funcionarios del gobierno.

Paralelamente, en Rosario, otro grupo inicia un plan de agitación y propaganda en los espacios públicos: calles, salas cinematográficas, muros de los edificios, mediante volantes y afiches con la expresión impresa "Tucumán Arde”. Al aproximarse el día de la inauguración de la muestra en la CGT se pegan afiches con la inscripción Primera Bienal de Arte de Vanguardia. El título de la convocatoria funcionaba como una incitación al doble discurso, habida cuenta que se alertaba al público sobre el verdadero sentido de la muestra, mientras se manifestaba una posición crítica a la formalidad de las bienales de la cultura oficial.

La Muestra

En el edificio de la CGTA de Rosario, la muestra se inaugura el 3 de noviembre y se mantiene por espacio de quince días, siendo visitada por una importante cantidad de público. Mediante una gran variedad de soportes, visuales, gráficos y sonoros, la muestra denuncia las condiciones de vida de la clase obrera en Tucumán: explotación, desocupación, represión policial, etcétera. Además se entregan ejemplares de un fascículo elaborado en base a una investigación sobre la situación económica y social de la provincia por parte del Centro de Investigaciones en Ciencias Sociales —CICSO— y bajo el título Tucumán Arde... ¿Por qué?

Por otra parte, se reparten transcripciones en papel de cintas grabadas, y el Manifiesto de Tucumán Arde.

La muestra se traslada a Buenos Aires y se inaugura en el local de la CGTA el 25 de noviembre. Su duración fue efímera, ya que a las 24 horas de su inicio la policía dio orden de levantar la muestra bajo la amenaza de la clausura del local de la central obrera.

La Convocatoria

La necesidad de profundizar el carácter político del hecho social Tucumán Arde, nos remite al tema del lugar donde se desarrolla la muestra.

En el siguiente sentido. En general, en los trabajos consultados que refieren al fenómeno Tucumán Arde, la CGT es considerada un lugar alternativo al de las instituciones del arte. Es decir: lo que antes se hacía en museos o galerías, ahora se hace en un local sindical, omitiéndose la necesidad de un tratamiento específico.

Respecto a este tema existe una rica experiencia, que no será tratada aquí, en relación a la participación de los artistas en los sindicatos, que incluye desde los que exponen sus obras en estos locales hasta los que practican el llamado arte del muralismo.

Se trata de concepciones que visualizan al sindicato como el lugar donde el arte puede desarrollar la función educadora de las masas. De alguna manera refiere a cómo visualizan los artistas a la organización sindical.

Decíamos que la propuesta de Tucumán Arde no es educar, sino transformar la realidad. Siendo éste el punto de partida de la Vanguardia del Arte, la muestra en la CGT es concebida como una posición dentro de un territorio social. La noción de territorio social se contrapone a la noción de lugar, y esto señala la distancia que existe entre educar a las masas y formar parte de ellas.

La verificación de lo que decimos se encuentra en el hecho inédito de que una muestra de carácter artístico sea convocada conjuntamente por los artistas y los dirigentes de la CGTA (11)

Finalmente. La noción relaciones sociales, fuerza de enfrentamiento y lucha, alianzas y grados de unidad en los enfrentamientos, nos permite conceptualizar a Tucumán Arde un hecho social.

Llegado a este punto se hace necesario distinguir el proceso que construye al hecho y la capacidad que tiene ese hecho de producir algo nuevo. En ese sentido, la hipótesis sería que lo singular de Tucumán Arde es que se encuentra dentro de una línea de enfrentamiento de una fuerza social en oposición política a política de gobierno y donde lo que le otorga el carácter político al hecho es la disposición de la fuerza para librar un enfrentamiento. Tucumán Arde no es un enfrentamiento en sí, pero se encuentra dentro de una fuerza decidida a librar los enfrentamientos y que luego se constata en los hechos de masas de 1969, y donde se establece la unidad del conjunto del movimiento obrero y de la clase obrera. Siendo esto así, la muestra en la CGTA es el indicador que se constituyó un nuevo territorio social (artistas, intelectuales, obreros), y donde el programa de la CGT es el que establece los términos de la unidad política de la fuerza.

La Vanguardia

El tema de las vanguardias ha sido y sigue siendo materia de debate entre los intelectuales que conforman el vasto campo de construcción del conocimiento. A la vez, somos conscientes de que el tema amerita ser investigado, pero localizándolo en algún campo de problemas de orden teórico-metodológico y sus referentes empíricos, artísticos, políticos, etc.

Desde nuestra perspectiva, asumimos el concepto de vanguardia como aquel destacamento más aguerrido y avanzado de una fuerza social, es decir, el momento y condiciones del desarrollo de una fuerza que destaca como su vanguardia al grupo que dispone mayor armamento moral y material.

En los trabajos sobre Tucumán Arde que hemos consultado, la noción de fuerza social y el concepto de lucha no son el punto de partida para el análisis, por ello se conceptualiza a Tucumán Arde como la confluencia de la vanguardia del arte y la vanguardia política.

Si tomamos en cuenta que todo ese período hace a una situación revolucionaria, no puede ser una confluencia entre vanguardia estética y vanguardia política, sino vanguardia estética y vanguardia revolucionaria. Y a su vez, no fue una confluencia sino una conjugación, habida cuenta que el propósito, tanto por parte de la clase obrera como de fracciones de pequeña y mediana burguesía, era la Revolución Social por medio del programa de Liberación Nacional y Social.


EL PROGRAMA DE LA ÉPOCA

Si los enfrentamientos sociales de algo tratan, es que son expresión de que se están sucediendo profundas transformaciones en la base material que convulsionan toda la superestructura política, ideológica, jurídica, artística que de ella derivan pero, para poder constatar este hecho, cuantificarlo y cualificarlo, debe pasar necesariamente un tiempo. Ese tiempo que permite finalmente articular las transformaciones de la base material y los enfrentamientos, en tanto expresión de las transformaciones en la estructura económico-social que explica los enfrentamientos y permite hacer observable la meta del movimiento más general.

Introduzcámonos por un momento a este laberinto por medio del discurso ideológico del cambio de las estructuras. Veamos.

Hacia 1966 no había fracción ni sector social al que no se le hiciera imperiosa la necesidad del cambio de las estructuras. Todos hablaban de Revolución, hasta las Fuerzas Armadas. El lema, tema y problema que constituyó la orden del día era la lucha por un cambio de las estructuras y, la fase por la que transitaba el desarrollo del capitalismo en esta formación social, imponía un cambio de las estructuras al interior de esta formación y en relación al nuevo orden del sistema capitalista mundial que la contiene.

Así vemos cómo fracciones del movimiento obrero comienzan a plantear la necesidad de un cambio de las estructuras; distintos sectores de la pequeña burguesía consideraban necesario un cambio de las estructuras y las distintas fracciones de la gran burguesía se encontraban en pie de guerra por un cambio de estructuras.

En este marco, el golpe de estado de 1966 se llevó a cabo bajo la denominación de Revolución Argentina y al margen de las intenciones y las imágenes ideológicas construidas, expresó la percepción del momento y de la época.

Siendo éste el contexto, hacia 1969 nos encontramos con este telón de fondo: en 1955 el gobierno de la Revolución Libertadora reprime al activismo político y gremial del peronismo y franjas del mundo obrero. Era la época de la llamada resistencia peronista (12). La estrategia de lucha que lleva adelante el movimiento obrero en el período 1955-1960 tiene como propósito la recuperación de su instancia económico-corporativa, la CGT (que había sido intervenida) y la recuperación de la legislación laboral y social que había sido anulada en 1955.

En el marco de este propósito, su lucha entra en una fase que hace a una estrategia política de carácter nacional. Es el período en que el movimiento obrero comienza a postularse como clase dirigente. La demostración de su recomposición política es su capacidad de enunciar un programa para el conjunto del país, conocido bajo el nombre de Programa de la Falda (1957). Su objetivo principal hace a la necesidad de establecer una estrategia política que se oriente hacia un cambio de las estructuras económicas sociales: 1) Control estatal del comercio exterior; 2) Nacionalización de empresas extranjeras monopólicas vinculadas a la exportación-importación; 3) Planificación de la comercialización; 4) Nacionalización de las fuentes de energía; 5) Nacionalización de los frigoríficos extranjeros; 6) Estatización del crédito; 7) Reforma agraria; 8) Extensión del cooperativismo agrario y 9) Control obrero de la producción y distribución de la riqueza nacional.

Las luchas obreras, con epicentro en la defensa del Frigorífico Lisandro de La Torre y la lucha contra la privatización de la enseñanza pública (lucha entre laica y libre) es un punto de inflexión, habida cuenta que a partir de estos hechos, se organiza un movimiento nacional y popular en defensa de lo nacional y donde lo nacional articula a obreros, estudiantes e intelectuales y a todos los sectores más radicalizados de la sociedad.

La iniciativa en las luchas es del movimiento obrero y es la CGT la que lanza su segundo programa (1962) que en sus enunciados mantiene una continuidad respecto al programa de 1957. Lo novedoso en el programa llamado de Huerta Grande es que plantea la necesidad de "la expropiación de la oligarquía terrateniente sin ningún tipo de compensación”.

El movimiento obrero y los sectores populares identificaban a la oligarquía terrateniente, el enemigo político y social. Esto se enlaza con la historia argentina, desde el siglo pasado y donde la defensa de las nacionalizaciones —estatizaciones— fue la base del programa de gobierno del peronismo y de la burguesía industrial argentina. De donde ese programa y las luchas sociales lo que expresan es la forma que toma un movimiento social acaudillado por el movimiento obrero.

La fuerza del movimiento obrero en lucha y del movimiento social logra constituir hacia 1962 un gran frente social que permite que dos candidatos del movimiento obrero —Framini-Anglada— se postulen para cubrir los cargos de gobernador y vicegobernador para la Provincia de Buenos Aires, ganando las elecciones, que fueron anuladas. En este frente social, confluyen la casi totalidad de los partidos de orientación marxista del período.

Hacia 1965, el movimiento obrero continúa con su plan de lucha que había sido aprobado en el Congreso Normalizador de la CGT de 1963. En dicho Congreso se aprueba un documento que tiene carácter de Programa General bajo el título El cambio total de las estructuras Económicas. Este programa, en términos políticos e ideológicos, es una prolongación de los anteriores, siendo lo novedoso el enunciado de un cambio del sistema, y no dentro del mismo.

Decíamos que, producto de las luchas políticas y sociales del período se había logrado constituir una alianza entre obreros, estudiantes e intelectuales alrededor de un programa que hacía pie en la defensa de lo nacional y una lucha detrás de la consigna de la Liberación Nacional y Social. Esta era la percepción del cambio de las estructuras desde el objetivo del campo popular.

En el período, todo el sistema institucional político y social queda atravesado por la demanda del cambio de las estructuras. La Universidad no queda al margen del espíritu de la época. En ese sentido es ilustrativo el programa Universidad: Política de masas, publicado en el periódico oficial del Partido Socialista Argentino de Vanguardia (1962) (13).

En ese documento se postula la necesidad de afirmar la relación Pueblo y Ciencia,"en el que la liberación de uno posibilita el desarrollo del otro. (...)

Es este un momento para aclarar, a nuestras mayorías universitarias, cómo poner en práctica y desarrollar el objetivo popular de la Liberación Nacional. Para ello es indispensable, previamente, definir las condiciones particulares de la Universidad, producto de las escaramuzas libradas en la búsqueda de hegemonías en su conducción académica.

El objetivo final de esta hegemonía nunca ha sido hasta el presente, instrumento de la liberación de nuestro pueblo en el campo de la cultura. Por el contrario, ha tenido como meta instrumentalizar a la Universidad para colocarla al servicio de las oligarquías y de los sectores de la burguesía, aliadas al proceso de penetración imperialista.”

Finalmente.

Hemos conceptualizado a Tucumán Arde como un hecho social que se desprende de un programa estético cuyo contenido guarda relación con el programa general de la época que refiere a la teoría de la transformación social.

Nuestra tesis consiste en afirmar que Tucumán Arde fundó una nueva estética como consecuencia que se incorporó a una línea de enfrentamiento en el campo de la lucha teórica entre Reformismo y Revolución. Este enfrentamiento refiere a una contradicción que brota en el seno del movimiento de masas, entre la concepción liberal reformista y el socialismo de masas.

La conceptualización de Tucumán Arde referida a la fusión del arte y la política sólo se sostiene, hoy día, por la ausencia de la lucha de masas y el desarme en el campo de la lucha teórica. Por eso aparece como la única visión posible, ya que se encuentra observada desde el campo de la cultura.

Pero lo que sucede es que Tucumán Arde estableció una ruptura con la cultura. A partir de esa ruptura, dejó de ser un hecho de la cultura y pasó a ser uno de los tantos hechos producidos por la fuerza de masas.

Buenos Aires, ARGENTINA.



sábado, 4 de agosto de 2007

A los ojos


Mirar a los ojos a la injusticia,
mirarla desde la médula hacia afuera,
con hilos de hiel desde el estómago y hacia afuera.
Mirarla entera, objetivamente,
desde la cognición misma de que se está vivo,
desde el azar cósmico de haber surgido llenos.
Con compromiso de cambio,
con la sangre impulsando motor vivo,
con el sudor regando los campos del frío.
Mirarla desde los dedos y el ombligo
abrazando a nuestros hijos no nacidos.

jueves, 2 de agosto de 2007

Detuvieron al chofer de Balbarrey armado, en un vehículo oficial y haciendo proselitismo

Fue el lunes a las 2 de la mañana en el norte de la ciudad. El agente llevaba debajo del asiento delantero un revólver calibre 32. La policía secuestró boletas del Frente Para la Victoria, folletos con leyendas en contra de Oscar Martínez y una campera con la inscripción “Balbarrey Intendente”. Lo detuvieron dos oficiales de la Unidad Regional Uno.
02-08-2007 | 06:30 hs.
Autor: Héctor Martín Galiano · Fuente: Notife

La noche, ese lugar donde la poesía levanta vuelo, como decían los griegos es, también, el lugar para las debilidades más humanas y las conductas impunes. Así lo habrá pensado Carlos Alfredo Vera Colombini, agente municipal y, según varias fuentes consultadas, chofer del intendente.

Vera, de 38 años y domiciliado también en la zona norte de la ciudad, fue detectado en la esquina de Avenida Gorriti y Aristóbulo del Valle, el lunes a las 2 de la mañana por el oficial ayudante Juan Gabriel González, de la Guardia de Infantería, quien patrullaba junto al Cabo Gabriel Enrique Rodríguez, en el móvil 3246, la ciudad en la jurisdicción de la subcomisaría 11º.

Los policías vieron con asombro como una camioneta pick up color blanca, marca Ford, modelo Ranger, doble cabina, estaba detenida con la luces de posición encendidas. Decidieron entrevistar al conductor que resultó ser Vera Colombini. Hasta ahí, un procedimiento raro y de rutina. Pero la sorpresa de los agentes fue que el conductor no podía responder a las preguntas de rigor, de reconocimiento básico de su identidad y dominio del vehículo. El estado tambaleante le impedía construir una frase. Según el acta de procedimiento de la policía, y con absoluto consentimiento del conductor, se procedió a requisar el vehículo. Debajo del asiento delantero, del lado del conductor, se encontró un revolver marca Taurus, calibre 32 con todos los cartuchos en su tambor. Los oficiales preguntaron por la documentación y Vera dijo “carecer de todo tipo de acreditación”. Inmediatamente se le colocaron las esposas de seguridad en sus manos y se lo traslado a la Subcomisaría 11º arrestado.

Vera Colombini, que no llevaba consigo documentación alguna, permaneció en la delegación policial y la camioneta fue requisada por el personal actuante. Lo que se le secuestró del interior causó la sorpresa de los agentes: una caja de cartón con volantes sin pie de imprenta con las inscripciones: “Otra forma de hacer las cosas, Massat, Martínez, Mafia”; “Cachi Martínez, valijero de Massat”; en hojas tamaño carta se encontraron otros volantes con la leyenda: “Cachi Martínez, hijo de represor y sobrino de intendente corrupto”; boletas sábanas correspondientes al Frente Para la Victoria, Lista Nro 59, aerosoles color negro, un par de zuecos tacos altos, una campera rompe vientos de color azul con la inscripción “Balbarrey Intendente”.

Además, y tras el resguardo de todos los elementos requisados, los agentes encontraron en la pick up, una Nota de Entrega con membrete de la Municipalidad de Santa Fe, donde se desempeña Vera Colombini.

“Ante la nocturnidad de la noche no fue posible establecer la presencia de testigos”, dice el acta de procedimiento y reza al cierre “se pidió la presencia de un agente de la División Medicina Legal para que se evalúe el estado psicofísico del trasladado”.

PERFIL DE UN AGENTE

El agente Vera Colombini, de 38 años y empleado de planta permanente de la Municipalidad fue varias veces apercibido por infringir el Código de Faltas de la Provincia de Santa Fe: el 18 de agosto de 1992 por publicar sin pie de imprenta, el 8 de marzo de 1997, por manifestaciones en espacios públicos no permitidos, también protagonizó contravenciones el 22 de diciembre de 1999. Tuvo dos denuncias por amenazas que se tramitaron en los juzgados correccionales en Santa Fe y la última por tenencia y portación, que esta en el fuero penal de instrucción.


Queda algo mas para decir????.....................

miércoles, 25 de julio de 2007

Oración de un desocupado


Padre,
Desde los cielos bájate, si estás, bájate entonces,
que me muero de hambre en esta esquina,
que no sé de qué sirve haber nacido,
que me miro las manos rechazadas,
que no hay trabajo, no hay,
bájate un poco, contempla
esto que soy, este zapato roto,
esta angustia, este estómago vacío,
esta ciudad sin pan para mis dientes, la fiebre
cavándome la carne,
este dormir así,
bajo la lluvia, castigado por el frío,
perseguido te digo que no entiendo, Padre, bájate,
tócame el alma, mírame
el corazón,
yo no robé, no asesiné, fui niño
y en cambio me golpean y golpean,
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
si estás, que busco
resignación en mí y no tengo y voy
a agarrarme la rabia y a afilarla
para pegar y voy
a gritar a sangre en cuello
por que no puedo más, tengo riñones
y soy un hombre,
bájate, qué han hecho
de tu criatura, Padre?
un animal furioso
que mastica la piedra de la calle?

Juan Gelman

YOLLEO

YOLLEO

Eh vos tatacombo soy yo, dí no me oyes tataconco soy yo sin vos sin voz aquí yollando con mi yo sólo solo que yolla y yolla y yolla entre mis subyollitos tan nimios micropsíquicos, lo sé lo sé ...y tanto, desde el yo mero mínimo al verme yo harto en todo junto a mis ya muertos y revivos yoes siempre siempre yollando y yoyollando siempre, por qué si sos por qué dí eh vos no me oyes tatatodo, por qué tanto yollar responde
.... y hasta cuándo
Oliverio Girondo*



domingo, 22 de julio de 2007

LA SEMANA SANTA DE LOS INDIOS TERMINA SIN RESURRECIÓN



"Declaro la unidad de la raza
humana. Me resisto a la insípida
pretensión de admitir razas
superiores y razas inferiores"
Alexander Von H
umboldt (1)

LA SEMANA SA
NTA DE LOS INDIOS TERMINA SIN RESURRECIÓN (2)
A principios de nuestro siglo, todavía los dueños de los pongos, indios dedicados al servicio doméstico, los ofrecían en alquiler a través de los diarios de La Paz. Hasta la revolución de 1952, que devolvió a los indios bolivianos el pisoteado derecho a la dignidad, los pongos comían las sobras de la comida del perro, a cuyo costado dormían, y se hincaban para dirigir la palabra a cualquier persona de piel blanca. Los indígenas habían sido bestias de carga para llevar a la espalda los equipajes de los conquistadores: las cabalgaduras eran escasas. Pero en nuestros días pueden verse, por todo el altiplano andino, changadores aimaraes y quechuas cargando fardos hasta con los dientes a cambio de un pan duro. La neumoconiosis había sido la primera enfermedad profesional de América; en la actualidad, cuando los mineros bolivianos cumplen treinta y cinco años de edad, ya sus pulmones se niegan a seguir trabajando: el implacable polvo de sílice impregna la piel del minero, le raja la cara y las manos, le aniquila los sentidos del olfato y el sabor, y le conquista los pulmones, los endurece y los mata.
(...) No se salvan, en nuestros días, ni siquiera los indígenas que viven aislados en el fondo de las selvas. A principios de este siglo, sobrevivían aún doscientas treinta tribus en Brasil; desde entonces han desaparecido noventa, borradas del planeta por obra y gracia de las armas de fuego y los microbios. Violencia y enfermedad, avanzadas de la civilización: el contacto con el hombre blanco continúa siendo, para el indígena, el contacto con la muerte. Las disposiciones legales que desde 1537 protegen a los indios de Brasil se han vuelto contra ellos. De acuerdo con el texto de todas las constituciones brasileñas, son «los primitivos y naturales señores» de las tierras que ocupan. Ocurre que cuanto más ricas resultan esas tierras vírgenes más grave se hace la amenaza que pende sobre sus vidas; la generosidad de la naturaleza los condena al despojo y al crimen. La cacería de indios se ha desatado, en estos últimos años, con furiosa crueldad; la selva más grande del mundo, gigantesco espacio tropical abierto a la leyenda y a la aventura, se ha convertido, simultáneamente, en el escenario de un nuevo sueño americano. En tren de conquista, hombres y empresas de los Estados Unidos se han abalanzado sobre la Amazonia como si fuera un nuevo Far West. Esta invasión norteamericana ha encendido como nunca la codicia de los aventureros brasileños. Los indios mueren sin dejar huellas y las tierras se venden en dólares a los nuevos interesados. El oro y otros minerales cuantiosos, la madera y el caucho, riquezas cuyo valor comercial los nativos ignoran, aparecen vinculadas a los resultados de cada una de las escasas investigaciones que se han realizado. Se sabe que los indígenas han sido ametrallados desde helicópteros y avionetas, que se les ha inoculado el virus de la viruela, que se ha arrojado dinamita sobre sus aldeas y se les ha obsequiado azúcar mezclada con estricnina y sal con arsénico. El propio director del Servicio de Protección a los Indios, designado por la dictadura de Castelo Branco para sanear la administración, fue acusado, con pruebas, de cometer cuarenta y dos tipos diferentes de crímenes contra los indios. El escándalo estalló en 1968.
La sociedad indígena de nuestros días no existe en el vacío, fuera del marco general de la economía latinoamericana. (...) La expropiación de los indígenas -usurpación de sus tierras y de su fuerza de trabajo- ha resultado y resulta simétrica al desprecio racial, que a su vez se alimenta de la objetiva degradación de las civilizaciones rotas por la conquista. Los efectos de la conquista y todo el largo tiempo de la humillación posterior rompieron en pedazos la identidad cultural y social que los indígenas habían alcanzado. Sin embargo, esa identidad triturada es la única que persiste en Guatemala. Persiste en la tragedia.
En semana santa, las procesiones de los herederos de los mayas dan lugar a terribles exhibiciones de masoquismo colectivo. Se arrastran las pesadas cruces, se participa de la flagelación de Jesús paso a paso durante el interminable ascenso del Gólgota; con aullidos de dolor, se convierte Su muerte y Su entierro en el culto de la propia muerte y el propio entierro, la aniquilación de la hermosa vida remota.
La semana santa de los indios guatemaltecos termina sin Resurrección.

(1) Científico y viajero alemán que recorrió el territorio colombiano a principios del siglo XIX
(2) Fragmento del texto * "Las Venas abiertas de América Latina" de E. Galeano



sábado, 21 de julio de 2007

Manu Chao - Rainin' in Paradize

Este tema que ya había mostrado antes pero con un nuevo video, filmado por Kusturica en Buenos Aires y con la participación de miembros de La Colifata. Gente verdaderamente grossa.
De paso aprovecho para comentarles un rumor que me llegó: se dice que Manu andaría nuevamente por nuestros pagos antes de fin de año. Lo esperamos...


Muestra de Stencils Post Inundación 2007 (3º y ultima parte....?)






miércoles, 18 de julio de 2007

De elefantes, hormigas y revoluciones

Decía Julio Cortázar que decía Marcel Duchamp que los elefantes son contagiosos, y decía Julio que él agregaría que las revoluciones también son contagiosas.

Y las hormigas, Julio. Basta ir a mi cuartel donde, con paciencia y dedicación, se han instalado en las paredes, el suelo y hasta en el techo. Eso sí, faltará el alimento, pero hormigas tenemos para rato o, más bien, ellas nos tienen a nosotros, y la convivencia pacífica es nuestra garantía de supervivencia. Los elefantes, está claro, confirman una vez más que la naturaleza imita al arte y esa pesada asimetría lo reconcilia a uno consigo mismo.

Pienso que la historia habrá de hacerles justicia algún día a los elefantes, sobre todo si son de color violeta y la trompa verde. Este ser noble y modesto mucho tiene de símil con la hormiga, por más que sus relaciones sean, como las llamarían los "brillantes" politicólogos, de guerra fría (que en nuestra América está ya en punto de ebullición). ¿Ves cómo tengo razón? Apenas está uno hablando de elefantes y hormigas y ya tocan a la puerta los servicios de inteligencia made in Fort Gullick, cosa que al elefante lo deja imperturbable y de la hormiga ni hablamos, bastante trabajo tiene con el azúcar que derramé al servirme el café.

Bueno, pero trataba de decir que las hormigas y los elefantes tienen sospechosas similitudes. Por ejemplo, los elefantes les gustan a los niños, pero es de notar que los dueños de circos y zoológicos no comparten ese entusiasmo cada vez más acallado por grupos "musicales" y etcéteras vestidos con modas galácticas (o eso creen), porque si no, no me puedo explicar cómo obligan a los paquidermos a viajar en esos camiones tan incómodos y oscuros. En fin, los elefantes son seres incomprendidos y también las hormigas. Por ejemplo, el otro día un sanitario me ha soltado un largo discurso sobre lo antihigiénicas que son las hormigas y las bondades que nos traería acabar con ellas.

No lo creo. Además de la simpatía que me provocan, acabarían venciendo en esa pequeña guerra que nos iría agotando mientras ellas crecen. Todos los cursos de contrainsurgencia y todas las maniobras militares no bastarían para siquiera intimidarlas. Son más y conocen mejor el terreno. Yo estoy por una alianza o, por lo menos, un pacto de no agresión, de convivencia pacífica. Esto último creo que ha dado resultado. El cuartel tiene sus horarios. En la intendencia, por ejemplo, hay horas para que hombres y mujeres deambulen neciamente en ese lugar y horas para que las hormigas busquen alimento o se paseen en las piedras porque afuera está el calor o la lluvia. En fin, en estos pocos días hemos sido felices. Admito que tratándose de elefantes el problema crecería desmesuradamente, pero creo que terminaremos arreglándonos. Sí, sí, ya sé que los sanitarios, iracundos, se disponen a escribir sendas cartas hablando de la cantidad de microbios que las hormigas acarrean, y ni hablar de los elefantes, pero creo que me doy a entender. Las revoluciones también son antihigiénicas... para el neoliberalismo. Sobre todo porque son contagiosas (como los elefantes y las hormigas). Y así como hay que aprender a amar a las hormigas y los elefantes, hay que aprender a amar y hacer las revoluciones.

Volviendo a la relación entre las hormigas y los elefantes, a mí no me convence esa aparente indiferencia que asumen una al paso del otro. Sospecho una secreta alianza en ese ignorarse mutuamente. Tal vez se ayudan sin saberlo nosotros; tal vez tras las grandes orejas se esconden las hormigas por millones, recuperan fuerzas, conspiran y preparan el contraataque cuando alguna campaña higiénica las ha obligado a un repliegue táctico; tal vez las hormigas construyen bajo tierra inmensas galerías para resguardar a los elefantes cuando los niños terminen por olvidarlos y queden en las perversas manos de los dueños de los circos. ¿A dónde irían si no bajo tierra a esconderse? ¿Dónde podrían rehacer sus fuerzas sin que fuertes cazadores armados con napalm los encontraran? Quién dice que no, a lo mejor...

Por ejemplo, cuando veo un elefante, en las afueras de un circo o en un zoológico, se me contagia casi inmediatamente y sé que me miran con secreta complicidad, dándome a entender que se preparan para rebelarse. Seguro es que las jaulas no ni tampoco las cadenas que los atan. Las romperán un día e irán felices a retozar, por fin, en los jardines y a comer todo el algodón de azúcar que quieran (todo elefante que se respete enloquece de gusto con el algodón de azúcar y con retozar en los jardines y mejor si tienen una fuente).

Por esto, y por otras cosas, hay que hacer una revolución...

Subcomandante Insurgente Marcos


Los Pingüinos, serán Revolucionarios o Neoliberales.....????

martes, 17 de julio de 2007

Chispas Danzantes



" Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al cielo. A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos.- El mundo es eso - reveló-. un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla con la luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay gente de fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas; algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman, pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca se enciende."

Eduardo Galeano

El Analfabeto Político también reenvia "Cadenas"

Hace unos dias me llegó el siguiente mail:

"SANTAFESINOS:
TODOS EN LUCHA CONTRA EL PLAN DEL ROSARINO HERMES BINNER, QUE EN CASO DE SER ELECTO GOBERNADOR PRETENDE MUDAR LA CAPITAL A ROSARIO Y DEJAR SIN TRABAJO A 60.000 FAMILIAS DE ESTA CIUDAD QUE VIVEN DEL ESTADO.
LA CAPITAL SE QUEDA ACÁ. HACER CORRER POR FAVOR! CUANDO ESTAMOS LEVANTANDONOS, NOS QUIEREN SEGUIR EMPOBRECIENDO"


Entendiendo que no es otra cosa que un estrategia mas del PJ (no comparable con el clientelismo y el punterismo que ejercen en toda la provincia), y que los que reenviaron y reenviaron este mail son unos verdaderos "Analfabetos políticos" como diría muy bien Bertolt Brecht. Son ciegos o ignorantes, no se, pero lo único que hicieron fue seguirles el juego a los amigos peronistas, dándoles una manito con la candidatura de Rafael Bielsa. Me indignó mucho recibir esto, comentandole a un amigo esta basura hecha cadena le pedí que ensayara una respuesta a ese mail y aquí está:



Mi muy estimada gente celosa de su "capitalia" santafesina:

Me gustaria saber en primer lugar de donde sacan la informacion acerca de la mudanza de la Capital a Rosario, ya que esta no figura en ningun plan oficial del Frente Progresista, de hecho Binner ya compro una casa en Santa Fe para mudarse en caso de ganar en Setiembre.

Luego me gustaría saber si REALMENTE creen q el estado provincial (y no el municipio que no se puede mudar a ningún lado, pq ES EL MUNICIPIO!) tiene 60 mil trabajadores en esta ciudad... de ser esto cierto mas de 50 mil de seguro son ñoquis, ya que 60 mil es una cantidad espantosa y veria muy bien que se los limpie, mudando la capital o NO. O sea, media pila, de las aproximadamente 200 mil personas del padrón electoral 60 laburan en el gobierno provincial?? Poco serio.

además: eso de "estamos levantándonos".... ¡¿Lo que?! Levantándonos? yo mas bien diria hundiéndonos debido a la facilidad con la q esta ciudad hace agua literalmente hablando. Eso de q nos "estamos levantando" es verso del PJ que hace 24 años gobierna la provincia que siendo una de las mas ricas del país mantiene una crisis económica similar a la de las provincias mas pobres.

Ser la capital o no (insisto que el traslado de la capital no es cierto) no asegura ni evita el desarrollo, de muestra está Rosario que sin ser la capital se ha desarrollado mucho mas que Santa Fe que si lo es. Si el tema pasa por el "orgullo" -casi futbolístico- de "ser la capital"... Muchachos creo q hay cosas mas importantes de las que preocuparse y de ultima si mudar la capital a Rosario beneficia en algo a la provincia y por ende a la ciudad de Santa Fe(digo por ultima vez q esto no va a pasar) QUE SE HAGA. De nada nos sirve ser la capital de la miseria.

Por ultimo aclarar -porque ya me los estoy imaginando- que NO SOY ROSARINO, ni tampoco Binner!!! Soy de Santa Fe y Binner es de Esperanza.

No se prendan de las campañas sucias del PJ, no digo que Binner sea el salvador de la patria ni mucho menos pero en definitiva veria muy positivamente desplazar del poder al PJ INUNDADOR Y CORRUPTO.

Saludos a todos

Claudio (elkaio@hotmail.com)

lunes, 16 de julio de 2007

La Protesta

Por Carlos A. Solero *

Fundado en 1897, por dos proletarios Gregorio Inglán Lafargue y Antonio Pellicer Paraire, el periódico anarquista La Protesta siempre fue mucho más que una publicación. Fue un ámbito de iniciativas de organización para la lucha, un frente de confluencia de escritores, periodistas y una incandescente llama productora de ideas a la que nadie pudo ni puede detener.

Nacido como La Protesta Humana, el médico irlandés Juan Creaghe, antiguo editor de El Perseguido, compró nuevas máquinas que permitieron ampliar la tirada y le cambió el nombre para tornarlo más fácil al pregón de los canillitas, más de una vez efectuaba la distribución personalmente en su mateo para evitar las requisas de "orden social".

En la huelga de inquilinos de 1907, La Protesta fue el vocero de los desheredados, maltratados por las clases dominantes y sus lacayos de sotana y uniforme.

Los talleres de La Protesta padecieron múltiples atentados en las cruentas jornadas de huelga. A pesar de esto siempre salía puntualmente publicado por la valiente e ingeniosa labor de sus editores.

En la huelga de 1909, recordada por la masacre de obreros llevada adelante por la soldadesca de Figueroa Alcorta, su sala sirvió para el velatorio del marítimo Juan Ocampo, asesinado por las fuerzas policiales al mando del Coronel Ramón Falcón.

Escribieron en las páginas de La Protesta: Eduardo Gilimón, Alberto Ghiraldo, Florencio Sánchez, Rodolfo González Pacheco, Virginia Volten, entre otros.

La Protesta tuvo diversas etapas quizás la más prolífica fue bajo la dirección de Emilio López Arango y Diego Abad de Santillán, con dos ediciones diarias, de mañana La Protesta y por la tarde el vespertino La Batalla. Un suplemento semanal y otro quincenal con notas sobre anarquismo y sus tendencias, literatura latinoamericana y universal, sociología, filosofía y psicología. Además una editorial que publicaba libros y folletos de Bakunin, Proudhon, Malatesta, Luiggi Fabbri,etc.

La Protesta polemizaba con el periódico Cúlmine de Di Giovanni, sobre cuestiones tácticas de la lucha social, medios y fines. El uso de la violencia en las luchas de masas, los atentados, etc.

Desde La Protesta se denunciaron las matanzas de la semana de enero de 1919, las huelgas contra La Forestal, La Patagonia Trágica y los fusilamientos de 1500 obreros a manos de los esbirros de Varela y Anaya, enviados por Yrigoyen. Propulsaba la campaña pro liberación de Sacco y Vanzzetti.

Con el advenimiento en 1930 de la dictadura uriburista, en primer término y luego la década infame y la andanada fascistoide del 43, las dificultades de edición crecieron las persecuciones a los militantes ácratas, espaciaban las salidas del periódico.

El gobierno peronista con su férrea censura atacó a la prensa revolucionaria y La Protesta no fue la excepción. Luego la heroica huelga de los obreros navales, hallará a La Protesta junto a los trabajadores enfrentando a capitalistas y dictadores.

La década del 60, fue un renacer de polémicas ideológicas y acciones. Por aquel tiempo escribían en las columnas de La Protesta: Angel Cappelletti, Oscar y César Milstein, Eduardo Colombo, Herbert Marcuse.

Al finalizar al década del 70 un grupo de jóvenes extasiados con la lucha armada promueve un debate al interior de la publicación anarquista, pero el Grupo Editor marca con claridad la línea anarquista en desacuerdo con la vía del foco guevarista y la confluencia con las tendencias autoritarias del socialismo.

La Protesta denuncia las maniobras de la dictadura de Lanusse y alerta sobre la masacre en ciernes de la mano de la maquinaria estatal, los burócratas sindicales y las fuerzas armadas.

Un editorial de La Protesta de junio de 1976, titulado "Nosotros acusamos" elabora un certero y dramático análisis de coyuntura, denuncia la represión militar, los secuestros, torturas y desapariciones.

La noche negra se abate sobre la región con secuela de horror y espanto.

En junio de 1982, reaparece La Protesta, denunciando los asesinatos de Cambiasso y Pereyra Rossi, sigue hasta nuestros días la lucha y la prédica el insobornable paladín libertario, del vocero de los oprimidos que hace historia con sus páginas rojinegras, sin concesiones ni medias tintas con debates e ideas polémicas y reflexión en pro de una sociedad anarquista, sin explotación ni injusticias: socialista y libertaria.

* Miembro de la Biblioteca y Archivo Histórico Social "Alberto Ghiraldo".

Contratapa de Rosario/12 publicada hoy, martes 17 de julio de 2007


Casa Babylon - Mano Negra


Lista De Temas:

1- Viva Zapata (2:02)
2- Casa Babylon (2:01)
3- The Monkey (2:47)
4- Señor Matanza (4:06)
5- Santa Maradona [Larchuma Football Club] (3:27)
6- Super Chango (2:53)
7- Bala Perdida (2:13)
8- Machine Gun (4:25)
9- El Alakran (la Mar está Podrida) (3:50)
10- Mama Perfecta (1:54)
11- Love and Hate (2:28)
12- Drives me Crazy (3:38)
13- Hamburger Fields (3:14)
14- La Vida (La Vida me Da Palo) (2:41)
15- Sueño de Solentiname (2:54)
16- This is my World (4:48)

DESCARGAR:


domingo, 15 de julio de 2007

Declaraciones de Carlos "Inundador" Reutemann

Domingo 15 de julio de 2007 - 08:20

A 400 KM. DE LA CIUDAD INUNDADA EN 2003

Carlos Reutemann dijo que “los escraches de los Inundados de Santa Fe fueron organizados por el Partido Socialista”
En el marco de la visita del Presidente de la Nación a la ciudad de Rufino, en el sur de la provincia, el ex gobernador de Santa Fe y actual senador nacional declaró ante la prensa que los “escarches” que los damnificados por la inundación de 2003 fueron organizados y montados desde el socialismo.
13-07-2007 | 15:43 hs.
Autor: MSD · Fuente: Notife.com/El Ombligo del Día-LT10

En el mediodía de hoy, el Presidente de la Nación, Néstor Kirchner, junto con el Gobernador de Santa Fe, Jorge Obeid, encabezó un acto en la ciudad de Rufino –al sur provincial- en el que se inauguraba simbólicamente un tramo de la Ruta Nacional Nº 7 sobre La Picasa.

En ese marco, el ex gobernador de Santa Fe y actual senador nacional por el justicialismo, Carlos Alberto Reutemann tuvo sorprendentes declaraciones sobre los damnificados por las inundaciones que azotaron la ciudad capital de la provincia en 2003.

Reutemann disparó que “los escraches que hicieron los inundados de la ciudad de Santa Fe fueron organizados por el Partido Socialista” situación que la enmarcó dentro de una “campaña sucia”.

Además, el ex corredor de Fórmula Uno sostuvo que el candidato a gobernador por el Frente Progresista, Cívico y Social (FPCyS) Hermes Binner carga de mucho odio resentimiento en su campaña electoral.







sábado, 14 de julio de 2007

De-Loused in the Cromatoium - The Mars Volta

Lista de Temas:

1- Son Et Lumiere - Inertiatic Esp
2- Roulette Dares (The Haunt Of)
3- Tira Me Las Arañas - Drunkship of Lanterns
4- Eriatarka
5- Cicatriz Esp
6- The Apparatus Must Be Unearthed
7 - Televators
8- Take the Veil Cerpin Taxt

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